«Soy Chevy Chase y usted no lo es»
Al primer reparto del SNL les llamaban "los que no están preparados para el primetime". El primero que demostró que estaban equivocados fue un tipo guapo, divertido y un poco gilipollas: Chevy Chase.
En febrero de 1978, Chevy Chase regresaba al Saturday Night Live como presentador invitado (“host”, lo llaman ellos), un año y medio después de haber dejado el programa que lo había convertido en una estrella. El retorno de Chase era una gran noticia. Por eso el fotógrafo de Associated Press pidió tomar imágenes del reencuentro con el resto del reparto. En ella, sentados en un muro, aparecen Dan Aykroyd, Jane Curtin, Bill Murray, Laraine Newman, Gilda Radner y John Belushi. Delante, Garrett Morris y Chase. Todos miran a cámara sin mucho entusiasmo y algunos están bastante serios. El único que sonríe abiertamente es Chevy.
El fotógrafo de la agencia tomó diferentes capturas, pero quería algo más sexi: «Hagamos alguna más alocada, ¿no, chicos?». Y la sesión finalizó de golpe. Aykroyd y Belushi se largaron mascullando y cagándose en todo y en todo el mundo. Bill Murray se quedó, pero se mordió la lengua. Chase sonreía, pero no entendía que Lorne Michaels, el creador y mandamás del programa, no moviera ni un solo dedo para defenderlo.
Chevy Chase fue el primer presentador del Weekend Update, el noticiario satírico dentro del Saturday Night Live. Desde allí, entre otras noticias, dio una que se convirtió en un running gag, la que rezaba: «Generalísimo Francisco Franco is still dead».
La fama se le subió pronto a la cabeza y al acabar la primera temporada, los dejó tirados para dedicarse al cine, algo que no sentó muy bien a Belushi, Aykroyd y compañía. La semana de preparación y ensayos de ese SNL sería dura y acabaría en una pelea con Bill Murray.
Así empieza el capítulo que le dedico a ese mítico rifirrafe entre Chase y Murray en el libro Hazme reír (o Fes-me riure, en català). Si te interesa la comedia, creo que te va a gustar y, ahora que se acerca Sant Jordi, es una opción excelente para regalar incluso para gente a la que no le guste leer. ¡Hazte con él!
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He tardado en darme cuenta de la importancia que tenía ese programa por el que han pasado casi todos mis ídolos de los 80. Respecto a Chevy Chase es lo que es, la última vez que le he disfrutado es en la serie community, y de allí tuvo que salir por ser demasiado parecido al personaje que encarnaba, bastante racista y muy gilipollas. Pero a la vez un p*** genio